Como otro año más, celebrábamos el día del club para cerrar la temporada. Una temporada extraña, difícil, muy difícil de gestionar, con numerosos cambios y dificultades, adaptándonos a las adversidades de la pandemia y de sus consecuentes normas, en constante cambio. Por ello mismo, no podemos dejar de DAR LAS GRACIAS a aquellos patrocinadores y colaboradores que ante un año difícil han continuado con nosotros, como son LUJAMA GRUPO INMOBILIARIO, CBRE ESPAÑA y Zaragoza Deporte.
Después de entrenamientos por grupos, hasta incluso el llegar a reducirse a grupos de 4, cambios de horarios cuando no se permitía actividad no esencial los fines de semana, cambios en el tipo de entrenamiento, etc, pudimos empezar a competir a partir de marzo, en una temporada, que ha sido más bien una pretemporada larga y constante, que una temporada al uso.
Como una importantísima nota positiva, destaca el hecho de conseguir una estabilidad de licencias en el equipo femenino alzándose como el club con más licencias femeninas sénior esta temporada (34) en la liga regional, e incluso, un crecimiento en licencias masculinas (hasta 71), superando el centenar de fichas en su conjunto y sacando dos equipos masculinos en todas las fases de competición, siendo el único club que lo ha conseguido.
Recordar también las incorporaciones de Gonzalo como preparador físico del equipo femenino, Rafa como entrenador de delanteros masculino y Compadre, que ha realizado una labor excelsa en el apartado técnico.
La siguiente temporada, no estará únicamente el reto de seguir aumentando el número de licencias sénior, sino una apuesta real por empezar a construir cantera, la cual, entrenará en el CDM La Granja a partir de septiembre, y que ha empezado a rodar este junio.
Por último, recordar el día del club de este año, donde se pudo ver a lechuzas de filosofía con un plumaje muy original, unos ciertos nadadores que intentaban presumir de abdominales no existentes, «autos de choque» con numeración y banderita incluida, unos tercios que no se aclaraban como era el ala de su sombrero y trajeron alabarda en vez de pica o arcabuz, un plátano y un aguacate (con hueso incluido), y unos escoceses que además de faldas, y boinas golfistas, se sumaron a la tradición de los pictos prerromanos de pintarse las carnes. Además, vino gente veterana que no ha podido estar esta temporada, como Hellen, Ariete, Mangueras, Mariano, Nebot y Pablo.
El torneo tocata (ganaron los nadadores de Jorge Pelphs Villanueva decidido por tiros a palos ante los tercíberos), dio paso a una suculenta paella que se cogió con mucho gusto, seguida de regalos y menciones para gente cuyo esfuerzo ha destacado durante la temporada (o más de una incluso), y una reserva en un velador del parque grande, con cuyas existencias de bebidas espirituosas, acabamos.
El club retomará los entrenamientos en campo a partir de septiembre. Ahora toca un breve descanso y empezar la pretemporada física, en el apartado deportivo. En el apartado de la dirección, toca seguir trabajando para seguir avanzando en la temporada que viene.
