Decálogo de valores del Íbero
“Humildad, respeto y sacrificio”
- Se deberá entrenar con humildad. El mejor jugador es el que siempre sigue aprendiendo.
- El respeto es clave para la convivencia. Sin respeto no hay grupo.
- El sacrificio debe ser personal, para que no sufra el colectivo.
- Entrenar mejora como jugador, como compañero y como persona.
- El compromiso es un contrato, romperlo nunca es positivo.
- Todos los convocados jugarán, pero para eso, hace falta estar convocado, y para ser convocado hace falta entrenar.
- Los jugadores del club, son personas, son nuestros compañeros, y debemos procurar el bienestar de todos ellos, dentro y fuera del campo.
- Entrenando o jugando, se representa al club. La actitud de respeto y caballerosidad del club debe ser representada por todos y cada uno de los jugadores.
- Jugar sucio está prohibido, jugar duro es una obligación.
- Nunca es suficiente, siempre se puede aportar más.