Tanto Linces como Ibero, con alineaciones ajustadas, mostraron orgullo y sacrificio, pero no bastó para conseguir la victoria.
LINCES XV 29 – 34 EJEA/GIGANTES DE NAVARRA
En el caso de Linces, el partido fue un toma y daca, en el que cada ensayo por parte de Gigantes/Ejea era contestado por uno nuestro, llegando al descanso con una ventaja de 2 puntos, (19-17) gracias a los ensayos de Charly, Marquina (que se estrenó ensayando) y Miguel Molina «Tarzán», con dos transformaciones de Compadre.
Sin embargo, el rival, se plantó en nuestro campo y consiguió dos ensayos (uno de ello con transformación), para poner un 19-27, y querer sentenciar el partido. No fue así, ya que saliendo de la 22, dos golpes de castigo eran jugados a la mano y se aprovechaba para sumar 3 puntos con un golpe centrado, y estar a distancia de ensayo transformado, asegurando al menos el bonus defensivo.
En una nueva jugada también con buena continuidad, Linces cogía descolocada a la defensa visitante, y Luismi anotaría bajo palos. La transformación no era fallada y el encuentro se empataba a 7 minutos del final.
Desgraciadamente, los nuestros no pudieron evitar las acometidas del adversario, y a tan sólo dos minutos para el final, el combinado de Ejea/Gigantes de Navarra, conseguía un ensayo que le daría la victoria.
Los nuestros sumaron bonus ofensivo y defensivo, pero la sensación es que se pudo ganar el partido y por falta de tensión en momentos puntuales, los errores condenaron.
La semana que viene espera una Soria muy anclada en su melé, rival tampoco nada fácil en su campo.
ÍBERO 5 – 19 USJ FÉNIX
Partido durísimo el que les tocó jugar a los nuestros. Con tan sólo un cambio, que prácticamente no existió, puesto que antes de los 5 minutos, Lalo era sustituido por lesión muscular, y había que mover a Mocho, de su habitual puesto de flanker, al puesto de segundo centro, para que Munu se moviera al ala.
80 minutos en los cuales, apenas se tuvo la posesión, y hubo de defender agónicamente, resistiendo en cada entrada del Fénix, quien insistía con su delantera, pero retrocedía sus balones abiertos. Al término de la primera parte, un 5 – 14, dejaba claro lo apretado del resultado. En la segunda parte, el Fénix ensayaría de nuevo a 15 minutos del final, para dejar el definitivo 5 – 19.
De nuevo, un partido con mucha más intensidad que el habituado a ver en nuestra Liga, con un contrincante superior, pero alcanzable en un partido en el que pueda haber condiciones de igualdad, y donde los jugadores que salieron al campo demostraron tener los valores de sacrificio que se inspiran en el club.